En este momento tenemos varios tipos de test para detectar el coronavirus, cada uno de ellos funciona de una manera diferente, y como sabemos que puede ser un poco lioso, queremos daros una pequeña y sencilla guía para entender el funcionamiento y las diferencias de los tres tipos de test más utilizados.
PCR
Este test analiza el ADN del virus. Con un isopo se extrae una muestra naseofaríngea y se compara el material genético de esta muestra con el que ya tienen identificado del coronavirus.
Esta prueba es muy segura, si da positivo hay un 100% de posibilidades de tener la enfermedad, pero si da negativo hay una posibilidad mínima de que sea errónea por eso se recomienda repetir la prueba a los 10 días antes de hacer vida normal.
En este test el resultado es más lento que los otros, se tardan 3 o 4 horas en obtener los resultados, y en muchas ocasiones se deben llevar las muestras a laboratorios especializados.
El precio de esta prueba es un factor limitante en muchas ocasiones para realizársela, ya que es considerablemente más elevado que los otros test para identificar si tenemos la enfermedad o si estamos inmunizados.
TEST DE ANTÍGENOS
Este test se basa en la detección de unas proteínas (antígenos) que tiene el coronavirus.
También se hace a partir de una muestra de mucosa nasofaríngea, y la sustancia reactiva detecta la presencia o ausencia de la proteína del virus.
Los resultados se obtienen muy rápido, en tan solo 10 minutos y en el mismo lugar, sin tener que llevar la muestra a un laboratorio.
Si la persona presenta síntomas estas pruebas son muy fiables, pero algo menos fiables en pacientes asintomáticos.
Este tipo de test es muy valioso para un primer cribado rápido, ya que si da positivo tiene una gran posibilidad de que se padezca la enfermedad, si por el contrario es negativo se recomienda hacer pasados unos días un nuevo test o una prueba PCR.
TEST DE ANTICUERPOS
Este test detecta inmunoglobinas (anticuerpos) que crea nuestro organismo para defenderse del virus.
Se toma una muestra de sangre (una gota) del dedo y el reactivo señala si hay o no presencia de anticuerpos, es muy rápido, en 15 o 20 minutos ya tienes los resultados.
Es la gran apuesta para saber quién ha podido pasar la enfermedad COVID-19 y que, en teoría, durante un tiempo va a ser inmune, ya que los anticuerpos igM e igG que creamos son específicos para este tipo de coronavirus, no pueden confundirse con los de otra enfermedad, estos anticuerpos aparecen después de unos días de presentar los síntomas y a partir del día 11 son muy fiables.
No se puede garantizar que los pacientes que han pasado la enfermedad no vuelvan a contagiarse, pero sí que la presencia de anticuerpos en la sangre puede conferir protección contra el virus, así ha pasado con otro tipo de coronavirus o con el virus de la gripe.
Estos test son necesarios para confirmar que has pasado la enfermedad si no has presentado síntomas o cuando hace más de una semana que los presentas. Son muy útiles por ejemplo para el personal sanitario y personas que trabajan de cara al público, ya que puede trabajar con mayor seguridad si se saben portadores de anticuerpos.